Con estos datos no hace falta decir que se trata de un sector con presente... y futuro, ¿verdad? Si te gusta el deporte y te interesa formar parte de este área te contamos cómo:
¿Qué hay que hacer para trabajar en un gimnasio?
Para trabajar en un gimnasio es necesario contar con una titulación en el área del deporte, son varios los profesionales que trabajan en un gimnasio.
El primero que podríamos mencionar sería el preparador físico y nutricionista. Los instructores deportivos son aquellos que se encargan de preparar físicamente a las personas respecto a cualidades como fuerza, rapidez, resistencia, flexibilidad, movilidad y agilidad. Además deben disponer de los conocimientos necesarios para asesorar adecuadamente sobre los alimentos y bebidas óptimas para potenciar la actividad deportiva.
Dentro de esta rama también encontraríamos al entrenador personal. El entrenador personal es un profesional que ofrece un servicio personalizado a sus clientes, marcándoles las rutinas deportivas que deben realizar, así como la técnica correcta para llevar a cabo la realización de estos ejercicios. Entre sus funciones también supervisará el progreso de su cliente y le motivará a seguir adelante.
Otra opción sería formarse en una disciplina concreta como el instructor de pilates. El pilates es una actividad muy extendida actualmente. Sus múltiples beneficios para la salud hacen que personas de distintas edades y condiciones lo practiquen a diario.
Cada vez son más los gimnasios que cuentan con clases grupales de diferentes disciplinas y el pilates es una de las más comunes entre la oferta de todos los gimnasios de este tipo.
Para trabajar en una gimnasio, debes ser una persona:
- Empática
- Capaz de dirigir clases colectivas
- En buena forma física para realizar los ejercicios
¿Cuánto dinero se gana en un gimnasio?
Como en muchos negocios el salario que cobrará un entrenador de gimnasio dependerá de las instalaciones en las que vaya a formar parte y del tipo de contrato que tenga, no hay una regla escrita sobre cuanto dinero se gana formando parte de la plantilla de un gimnasio ya que son muchas las variables que entran en juego.
En general, un monitor de gimnasio cobraría alrededor de 10 horas en un gimnasio de ciudad. Si este profesional realiza entrenamientos personales podría aumentar esa hora hasta los 18 euros. Como hemos comentado, son datos orientativos.
Para que nos hagamos una idea, la media de una mensualidad sería entorno a los 40 euros, si añadimos clases presenciales este precio se iría incrementando. Y si realizamos un entrenamiento personal el precio rondaría entre los 15 euros la hora.
¿Qué es un monitor de gimnasio?
El mundo fitness está de moda. Para la correcta realización de este tipo de ejercicios muchas personas requieren de un monitor que pueda asesorarles, por lo que es un puesto de trabajo con grandes posibilidades dentro de los gimnasios. Este empleo precisa de profesionales preparados y una formación muy específica, además de tener interés por la musculación.
Los monitores de gimnasio se encargan de mejorar la condición física, la salud y el bienestar físico de las personas que acuden a estos centros deportivos.
Los monitores podrían encargarse de aconsejar a las personas que se encuentren entrenando en los gimnasios y también de realizar las clases dirigidas que se encuentren dentro de la oferta formativa. Muchas de las clases son específicas para ejercicios de fuerza y resistencia y son dirigidas por monitores de gimnasios especializados en musculación. Estos monitores se encargan de diseñar las rutinas de ejercicio que se realizarán en las clases dirigidas.
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